Síndrome Metabólico. ¿Signo de alarma?

¿Conoces algún amigo con menos de 40 años en sobrepeso (o esa «barriga» prominente), a quien le ha «subido la presión» y tiene unas pruebas de sangre alteradas (azúcar y colesterol)?

La palabra síndrome  se suele interpretar como sinónimo de enfermedad o de un grave padecimiento. El término realmente se refiere, a un grupo de signos o síntomas que caracterizan a una enfermedad o entidad clínica específica. En este contexto, incluímos al síndrome metabólico para definir a un grupo de «alarmas» que según estadísticas nacionales e internacionales se asocian al riesgo aumentado de padecer alguna enfermedad cardiovascular (ej. Infarto al miocardio), cerebral (conocido como ACV o derrame) y a la diabetes mellitus.

Las estadísticas norteamericanas sugieren que un 34% de la población adulta se encuentra en riesgo y éste aumenta con la edad.

El tratamiento incluirá un estilo de vida saludable, que llevaremos a cabo puntualizando cada signo de alarma.

Entonces,  ¿cuáles son los signos a tomar en cuenta?

  1. Presión arterial elevada: los parámetros establecidos como normales son 120/80mmHg, y valores aumentados representan un estado de hipertensión arterial.
  2. Niveles bajos de colesterol HDL (bueno). (Menos de 40 mg/dl)
  3. Niveles elevados de triglicéridos en sangre. (Más de 150mg/dl)
  4. Nivel de glicemia (azúcar) elevada. (Más de 100 mg/dl) (estos valores aplican también para los que toman medicamentos para hipertensión o diabetes mellitus)
  5. Circunferencia abdominal aumentados. (Más de 40 pulgadas en hombres y 35 en mujeres).

Para las recomendaciones lo haremos en este mismo orden:

  1. Controlar el peso adecuado para su estatura, reducir la ingesta de sal. Considerar la dieta DASH (por sus siglas en inglés «Dietary Approach to Stop Hypertension») que incluye frutas, vegetables, porciones reducidas de carnes.
  2. Aumente la ingesta de omega 3 (no en suplementos), sino en pescados, aceites vegetables (oliva, aguacate) y nueces.
  3. y 4. Reduzca la ingesta de azúcar (dulces, panes, pastas, repostería) y alcohol.
  1. Iniciar ejercicios de forma rutinaria y ajustar el balance adecuado en la alimentación.

Si conocen alguien similar al primer caso, recuérdenle que presenta signos de alarma y que un Síndrome metabólico puede lograr resolverse tomando las medidas de lugar. Trabajemos más en la prevención que en el tratamiento.

 

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