10 Consejos Para Un Corazón Sano

Cuidar nuestra  salud cardiovascular es un reto que enfrentamos día tras día, en el cual somos nosotros los principales actores para incidir atender de forma preventiva su cuidado. Aprovechando estas fechas de celebridad y conmemoración del corazón, hoy compartimos algunos consejos de salud que ayudaran a mantener el mismo en buen cuidado.

1. Conoce tus números– Las condiciones pre disponentes a enfermedad cardiovascular se caracterizan por la ausencia de síntomas o signos de alerta. Condiciones como la hipertensión arterial, el colesterol y/o triglicéridos elevados solo son detectables con una medición puntual, al igual que la glicemia (azúcar) en etapas tempranas.  Como controlar algo que desconozco? Una evaluación  a tiempo y seguimiento son mandatorios en la prevención.

2. Ejercítate y muévete– Una rutina de ejercicio moderado ha demostrado beneficios en diversas variables del sistema cardiovascular. La recomendación estándar es un mínimo de 30 minutos 5 días a la semana, a mayor frecuencia mayor beneficio. Es importante destacar que esos 30 minutos no significan patente de corso para mantenernos inactivos las 23 y media horas restantes. Caminatas frecuentes en el día el uso de escaleras así como intervalos de actividad fuera del escritorio o sofá son formas de mantenernos activos en adición al gimnasio.

3. Vigilemos la cintura– La obesidad central está asociada a un mayor riesgo de eventos cardiovasculares.

4. Dieta balanceada– La variedad en la alimentación es clave para una buena salud cardiovascular.  No existen alimentos buenos o malos, la proporcionalidad y las cantidades son claves para una buena salud, debemos limitar la ingesta de grasas saturadas, sin desviar la alimentación hacia carbohidratos o azucares procesados.  Las frutas y vegetales deben formar parte de la dieta diaria en adición a un equilibrio de carbohidratos y proteínas.

5. Disminuyamos la Sal– La ingesta de sal ha estado asociada a un aumento de los niveles tensiónales en pacientes con hipertensión arterial establecida. Estudios recientes demuestran una correlación entre alta ingesta a edad temprana y desarrollo de la misma. Recordemos que en adición al salero en la mesa, la preparación de los alimentos y su preservación puede contener altos niveles de sodio.

6. No al cigarrillo– El fumar es perjudicial para el corazón en varios aspectos. Potencializa la formación de coágulos en la sangre, aumenta el endurecimiento de las arterias o arterioesclerosis, promueve la formación de aneurismas en la aorta y es un contribuyente importante a los infartos y accidentes cerebrales.

7. El sueño– Existen diversos aspectos relacionados al sueño y la enfermedad cardiovascular, el sueño insuficiente se asocia a un aumento de Infartos y arritmias. Trastornos como la apnea del sueño dificultan el control de la tensión arterial, y se relacionan a trastornos como insuficiencia cardiaca y arritmias.

8. Stress– Este factor se asocia a otros ya mencionados como vida sedentaria, dieta pobre y disminución del sueño. Sin embargo el stress per se promueve cambios fisiológicos asociados a Infartos. Tales como aumento de la tensión arterial y frecuencia cardiaca, movilización de grasas en la sangre así como una mayor tendencia a ruptura de placas en la arterias.

9. Escucha a tu médico –  El tratamiento preventivo debe llevarse a cabo bajo  instrucción y supervisión médica. Frecuentemente los pacientes abandonan tratamientos establecidos en base al consejo del vecino o a informaciones del internet o redes. Previo a la aprobación de un tratamiento años de investigación y experiencia validan el uso de los mismos. Recuerde que dentro de la prevención el control adecuado es esencial para un buen resultado.

10. Evaluación periódica – Existe un axioma en medicina que reza “la detección es una forma de prevención” y sin lugar a dudas si no evaluamos no detectamos. Si existe una disciplina donde podemos aplicarlo es la cardiología, hoy día contamos  con herramientas  diagnosticas y terapéuticas capaces de controlar y corregir la mayoría de  patologías  responsables de este flagelo causal de tantas muertes a destiempo.

– Dr. Pedro Ureña

 

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